Comunión Espiritual

“A tus pies me postro, ¡oh Jesús mío!, y te ofrezco el arrepentimiento de mi corazón contrito, que se hunde en la nada, ante Tu santa Presencia.
Te adoro en el Sacramento de Tu amor, la inefable Eucaristía, y deseo recibirte en la pobre morada que te ofrece mi alma.
Esperando la dicha de la Comunión sacramental, quiero poseerte en espíritu.
Ven a mí, puesto que yo vengo a Ti, ¡oh mi Jesús!, y que Tu amor inflame todo mi ser en la vida y en la muerte. Creo en Ti, espero en Ti, Te amo a ti Jesús. Amén”.


ORACIÓN POR LAS VOCACIONES EN LA IGLESIA DE CARTAGENA

Padre bueno y misericordioso,

mira con bondad a los sacerdotes, religiosos y religiosas de la Arquidiócesis de Cartagena.

Concédeles que en sus vidas siempre reflejen el rostro de Jesús, Buen Pastor, que nos invita a entregar la vida por las ovejas que colocas en nuestras manos. Guíalos con tu Espíritu Santo, para que sean fieles discípulos misioneros de tu Hijo Jesucristo, presente en la Eucaristía, en la Palabra y en los pobres.

Suscita generosidad en los jóvenes de la Arquidiócesis de Cartagena, para que sean capaces de decir sí, al llamado que tú les haces: discípulos misioneros, sacerdotes,  vida consagrada, vida matrimonial, para que, lleven la Buena Noticia de la Salvación a todos los hombres y mujeres, en todos los ambientes.

Por la intercesión maternal de la Santísima Virgen María, concede a tus hijos que has llamado a consagrarte a ti, una vida santa y alegre. Amén


Oración a San José del Papa Francisco

San José,  protege a Colombia, este país nuestro.
Ilumina a los responsables del bien común, para que ellos sepan – como tú – cuidar a las personas a quienes se les confía su responsabilidad.
Da la inteligencia de la ciencia a quienes buscan los medios adecuados para la salud y el bienestar físico de los hermanos.
Apoya a quienes se sacrifican por los necesitados: los voluntarios, enfermeros, médicos, que están a la vanguardia del tratamiento de los enfermos, incluso a costa de su propia seguridad.
Bendice, San José, la Iglesia: a partir de sus ministros, conviértela en un signo e instrumento de tu luz y tu bondad.
Acompaña, San José, a las familias: con tu silencio de oración, construye armonía entre padres e hijos, especialmente en los más pequeños.
Preserva a los ancianos de la soledad: asegura que ninguno sea dejado en la desesperación por el abandono y el desánimo.
Consuela a los más frágiles, alienta a los que flaquean, intercede por los pobres.
Con la Virgen Madre, suplica al Señor que libere al mundo de cualquier forma de pandemia.
Amén.


Oración para estos tiempos difíciles

Señor y Padre,

Tú que no desprecias nada de cuanto has creado y que deseas que todos los hombres y mujeres alcancen vida plena; mira con bondad nuestra fragilidad que a veces trata de ceder.

Concédenos que nuestro corazón esté en alto, en esta hora de prueba.

Perdona nuestra incapacidad para hacer memoria de todo lo que cada día haces por nosotros.

Aleja de cada de uno de nosotros y de nuestros hogares todo mal.

Con Pablo hoy decimos: “Si tú estás con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?”

En toda adversidad “somos más que vencedores, gracias a aquel que nos ha amado”.

Ayúdanos a comprender que la belleza que salva al mundo es el amor que comparte el dolor.

Bendice los esfuerzos de quienes trabajan para que nosotros vivamos.

Ilumina a los investigadores, dales fuerza a cuantos trabajan en la curación de los enfermos, a quienes se están sacrificando por protegernos a todos.

Danos a todos la alegría y la responsabilidad de sentirnos cuidadores, unos de otros.

Da tu paz a quienes has llamado a ti; alivia la pena a quien llora la muerte de un ser querido.

Concédenos que también nosotros, como tu Hijo Jesús, pasemos en medio de los hermanos haciendo el bien, sanando las heridas y siendo solidarios con quienes la están pasando mal como consecuencia de la pandemia o de cualquier otra situación que nos hace sufrir.

Intercedan por nosotros, María nuestra Madre y todos los santos. Todos ellos siempre mantuvieron viva la esperanza de que “todo concurre para el bien de los que aman al Señor”.

Amén

¨Padre Fidel Oñoro Consuegra. Sacerdote Eudista del Minuto de Dios


Apoyo psicológico a personas, familias y comunidades.