• La Arquidiócesis de Cartagena celebró 10 años de Talitha Qum, un programa que busca prevenir la violencia sexual en niños, niñas y adolescentes.
  • El evento contó con la presencia de autoridades locales, líderes de la Iglesia y beneficiarios del programa.
  • Las autoridades se comprometieron a seguir trabajando para proteger a los niños, niñas y adolescentes de la violencia sexual.
  • Talitha Qum ha llegado a 3 barrios de Cartagena en los últimos 10 años y se espera que siga creciendo en el futuro.

La Arquidiócesis de Cartagena conmemoró con un emotivo evento celebrado en la Plaza de Los Coches, en el Centro Histórico, el décimo aniversario del programa de Pastoral Social Talitha Qum, iniciativa que busca prevenir la violencia sexual en niños, niñas y adolescentes.
El evento contó con la presencia de autoridades locales, líderes de la Iglesia, sociedad civil y niñas y adolescentes beneficiarias del programa.

Una década transformando vidas
La conmemoración de estos 10 años abrió con las palabras de Monseñor Luis Manuel Alí, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Bogotá y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia. Quien, en un emotivo discurso en nombre de todos los obispos de Colombia, agradeció por los años de servicio abnegado y misión por la protección de los más vulnerables a la obra Talitha Qum y la comparó con la zarza ardiente del libro del éxodo (3, 1 – 10), un lugar sagrado y del corazón mismo de Dios en favor de los más frágiles. “La obra Talitha Qum, es una zarza ardiente que simboliza lo sagrado de cada vida humana, un lugar del corazón de Dios mismo en ella, por eso merece nuestro respeto y abnegación en todo lo que ha realizado durante estos 10 años”.

En consonancia con este compromiso, El Señor Cardenal, Jorge Enrique Jiménez Carvajal, arzobispo emérito de Cartagena reflexionó sobre el papel sagrado de proteger a la infancia: «Tenemos una tarea larga y sueños grandes. Tenemos tres centros y necesitamos muchos dónde los niños y jóvenes de esta ciudad puedan aprender a defender su dignidad y nosotros podamos defenderlos».
En el marco de la celebración, se resaltaron también los logros alcanzados por Talitha Qum durante estos 10 años, destacando su impacto en la vida de cientos de niñas y adolescentes de Cartagena de los barrios La María, La Candelaria y San Francisco.

La hermana Blanca Nubia López, directora del programa, mencionó:
«Talitha Qum lleva 10 años transformando vidas, ha sido un camino muy esperanzador. En estos 10 años llegamos a 3 barrios de nuestra ciudad, pero la idea es seguir creciendo, llegando a otros rincones y siendo referentes en otros territorios. Nuestro sueño es extender la atención a niños, y adolescentes, una comunidad también afectada por este flagelo en la ciudad y esperamos que con nuestros aliados podamos hacer crecer esta misión».

Conciencia, compromiso y cooperación: claves para proteger a la niñez
El evento contó con la participación del alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, quien reiteró el compromiso de la administración distrital con la protección de la niñez:
«En pocas semanas haremos una cumbre de lucha frontal contra la trata de personas y Cartagena va a proteger a la niñez. La iglesia católica ha venido liderando y acompañando esta lucha que es de todos, ha sido un refugio para los más vulnerables, es necesario que el gobierno respalde este propósito”.
En el desarrollo de la conmemoración las niñas y adolescentes pedagogizaron a todos los asistentes con muestras artísticas y culturales en las que no hubo otro mensaje que la protección de sus derechos y el cuidado y respeto de su integridad. Canciones adaptadas con apoyo de los servidores de esta obra, que impactaron a los asistentes, obras teatrales de cómo reconocer este flagelo y qué hacer para prevenirlo, bailes que mostraban la postura y el empoderamiento de estas niñas y adolescentes, carteles, mensajes, y testimonios conmovedores fueron parte de esta gran agenda.

Monseñor Francisco Javier Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, a propósito de lo vivido durante la conmemoración, resumió el acto celebrativo en 3 palabras:
«Las niñas nos han regalado conciencia, nos han ampliado conciencias en las muestras que hemos evidenciado en este escenario. Esto sugiere nuestro compromiso, un compromiso que es de todos los que estamos acá. Crecemos en conciencia y adquirimos un compromiso. La tercera frase que resume esta gran celebración es cooperación porque esta conciencia adquirida, que motiva un compromiso nos involucra a todos y todas”.
Finalmente, el evento cerró con el recorrido por distintos stands donde se evidenció el trabajo de atención realizado por el programa a cada uno de sus beneficiarios : niños, niñas y adolescentes, familias y líderes comunitarios; a través de material lúdico pedagógico los visitantes podían reconocer el flagelo de la trata de personas y cómo actuar en su prevención, además se mostraban otras acciones que la iglesia en Cartagena lidera para garantizar entornos seguros y protectores en cada uno de sus espacios, con material de orientación sobre la oficina para la cultura del cuidado y las estrategias y acciones que guían este trabajo en Cartagena.
“Como iglesia católica tenemos un compromiso con la protección de los más vulnerables: estamos muy contentos de haber vivido esta experiencia, estamos llenos de retos y de desafíos para el futuro para seguir trabajando por la cultura del cuidado en nuestra iglesia particular ” concluyó el Padre Elkin Mauricio Acevedo, director de la Pastoral Social.