Rostro Mariano
Responsable: Padre Sahabel Porto Herrera.

Servicios:
Pastoral Mariana.
Religiosidad Popular.

¿Que es el Rostro Mariano?

El rostro de la Iglesia se ve reflejado de manera especial en María, la Madre de Jesús. Ella es Madre porque nos forma como auténticos discípulos y es modelo de discípulo porque ha dado un sí total a Dios en la persona de su Hijo y ha permanecido fiel hasta la cruz.

Pero de manera especial María es signo de esperanza para la Iglesia. Ella nos guía y nos recuerda nuestro compromiso de transformación de la historia en medio de la cual debemos ser signo de vida, de lo nuevo y de lo definitivo. Ser auténtico hijo de María implica aceptar ser un signo de contradicción, pero a la vez nos invita a ser opción, alternativa y contraste frente al actuar del mundo. El discípulo ha de ser signo de esperanza en algo nuevo y diferente porque espera la segunda venida de Cristo que inaugurará cielos nuevos y tierra nueva.

María en su misterio de la Asunción nos indica la plenitud a la que estamos llamados a participar en Cristo pero también nos señala la tarea de trabajar sin descanso para anticipar la segunda venida de Cristo. El deseo profundo de la Iglesia que se manifiesta en el grito: “Ven, Señor Jesús” (Ap 22, 20) es a la vez el motor que nos mueve a obrar en compromiso con el presente. En esta fatigante construcción del Reino, María discípula nos anima y nos invita a no perder de vista la dimensión de plenitud y de futuro donde el triunfo de Cristo será universal y su poder y su justicia llevarán a plenitud la obra de la salvación (Ap 1, 8). María llevada al Cielo nos afirma que es posible que el Señor de la Parusía nos reconozca en el Juicio, si ya ahora reconocemos a Cristo presente en los hermanos.