Cartagena de Indias vivió un Nuevo Pentecostés

La Renovación Carismática Católica de Colombia, a través de su Consejo Nacional, escogió a Cartagena como la sede del I Encuentro Nacional Carismático “Evangelizadores con Espíritu”. Esta gran convocatoria tuvo una participación de 2300 personas, aproximadamente, venidas de 39 ciudades y municipios de país. Fueron tres días de intensa oración, compartir y reflexión con el fin de avivar el fuego del Espíritu Santo en la Iglesia, con miras a la celebración de los 50 años del nacimiento de la corriente carismática.

Desde el 22 hasta el 24 de marzo, Cartagena se convirtió en un Cenáculo en el que se clamaba con insistencia y anhelo la acción renovadora del Espíritu Santo para toda la Iglesia. Las delegaciones llegaron a Cartagena el sábado en la mañana y fueron recibidas en los hogares de personas generosas que abrieron las puertas de sus casas para que los peregrinos tuvieran un lugar apropiado para descansar y  disfrutar del Encuentro, siendo una oportunidad para evangelizar e intercambiar experiencias de vida cristiana.

El sábado en la tarde inició la programación con un avivamiento musical, seguido de un momento prolongado de oración y la celebración de la Eucaristía. El domingo, por du parte, además de la alabanza y la música, hubo dos predicaciones a cargo de la señora Yaneth Muñoz, de la Arquidiócesis de Medellín y Manuel Tenjo, de Bogotá, quienes, invitaron a volver a las fuentes del encuentro con Cristo: La oración, la lectura de la Palabra de Dios con una orientación pastoral, la celebración de los sacramentos, y la conversión radical dentro de la Iglesia. Ese mismo día, monseñor Jorge Enrique  Jiménez presidió la Eucaristía dominical, en la que invitó a todo el pueblo reunido a beber del agua viva que es Cristo y a permitir que su presencia en la vida de los discípulos misioneros no les deje buscar otros pozos que no satisfagan su necesidad de sentido.

El lunes festivo la comunidad pudo escuchar la predicación del padre Charlie García y expresar su compromiso de ser evangelizadores con Espíritu en sus ciudades y lugares de procedencia, esperando que cada día la Iglesia pueda ir cumpliendo con mayor fidelidad su misión de hacer discípulos a todos los pueblos.

Por Octavio Gabriel Martínez Garizábal, estudiante de comunicación social

@OctavioGabrielM